miércoles, 20 de febrero de 2008

La Clave Maravilla (Parte II)

Pues me bajé del auto y ahí voy sobre la morsa atacante

Yo: Sr. No habrá alguna forma de que no nos multe, díganos (se va a oir mal y corrupto pero mi mente también tiene algo de eso y lo primero que pensé es ya que diga cuanto y nos deje largarnos)

Y el muy méndigo se me pone de santo y dice “No señorita el mal ya está hecho”
Mientras, la Gloris hablaba por el celular a aquel individuo que nos había dado un poquito erróneas las indicaciones de la verificación y demás y nomás la notaba coloradota del puro coraje y yo mientras en mis “negociaciones”

Yo: Ah! Pues mire señor, ahorita mismo podemos salirnos de su ciudad, nomás díganos por donde y pues nos vamos jaja (Mr Morsa nomás me miraba con cara de “esta mensa que se cree”)

Mr. Morsa: a dónde se dirigen señorita??

Yo (buenísima onda ya simpatizando con Mr. Morsa) ahhh! Pues vamos de vacaciones a Cuernavaca…

Ho ho …error garrafal, eso significaba, van de vacaciones, a Cuernavaca, desde Guanajuato, traen $$$ y sí, a Mr. Morsa se le pintó en los ojotes el signo de $ (tipo caricatura japonesa), en ese momento descubrí que yo para eso de las “negociaciones” no nací..

Mr. Morsa: no señorita, no se puede, las cámaras ya me grabaron que las detuve y si no levanto su infracción me van a llamar la atención a mi…

Yo: chalessss, mire nadie ha visto (enterada o no, por ningún lado veía cámaras) nomás díganos por donde nos vamos y nos salimos derechito

Mr. Morsa: no se puede

Y que saca su reglamento de tránsito, el reglamento del “Pásele paisano”, el reglamento del “hoy no circula”, el reglamento de… de… y de… y nomás le falto la santa Biblia y uno por uno fue mostrando aquellas leyes que habíamos infraccionado, la multa según sus pendejos cálculos nos salía como arriba de $2,500 (más hotel, más comidas, más transporte, más regañiza de los papás incomprensivos como siempre, más día de descuento en el trabajo porque obvio no llegábamos, más violada o torteada, más pérdida de vacaciones) pos no!

Y ahí voy con Gloris que seguía maldiciendo por teléfono y no me impedía seguir haciendo mis negociaciones pendejas

Yo: Gloris, el gordito este nomás no quiere cooperar, le dije q….

Y después de la regañiza de Gloris por mi bocota, ahí vamos de regreso con Mr. Morsa habiéndole dado ya un buen tiempo a solas para que reflexionara por sus actos y lo hizo

Mr. Morsa: señoritas me acabo de comunicar con mi comandante y me dice que pues por su vago (quiso decir inepto pero se contuvo) conocimiento en las leyes capitalinas, podemos negociar este incidente

Lo sabíamos!!! No podíamos escapar de la ciudad monstruo sin una mordida bautizadora

Mr. Morsa: para esto mi comandante me acaba de autorizar la venta de una clave que ampara la mitad de la multa a la que ustedes se han hecho acreedoras (con su tono chilangote, ya saben no?), con esta clave en su poder podrán transitar por lo que les resta de camino y si las llegan a parar más adelante ustedes nomás les enseñan la clavesita esta y las dejan seguir sin problemas

Gloris y yo: pos ya que’ no nos da opciones y cuanto cuesta la clave???

Por un momento pensamos que no era corrupto como lo habíamos pensado, ah! Que buena onda el comandante he!, tan comprensivo él…
Gloris y yo: que???????????????????? $$$$$$ (no pondré el costo de nuestra clave maravilla porque la neta me da vergüenza, sólo les digo que nos bajó lo del SPA de las dos)

Pos ya que, flojitas y cooperando aceptamos, anótese que SI tratamos de negociar, pero la indicación del comandante era que pues no se podía (huy si, pinche comandante OGT) y esperamos a que Mr. Morsa sacara su formato de “Venta de Claves que amparan la mitad de la Multa” y pues nos quedamos esperando… Mr. Morsa tomo la licencia de la Gloris, la puso en el centro del reglamento del “Pásele Paisano” y le dijo, deposíteme ahí el efectivo y tome sus documentos (nomás le faltó en “con discreción”)

Ah! A Gloris le emana por los poros la frase de “Pinche Morsa Corrupta” pero nomás le sonrió bien mamona, con esa sonrisota que le aventaba a mi ex cuanto cínicamente le preguntaba “Cómo estas???” y era un “me cagas en la madre pero que le hacemos, te aguanto por mi amiga”, se dio la vuelta y yo tras ella, la clave nos la dividiríamos entre las dos

Y pues ya, Mr. Morsa no sacó jamás el formatito esperado, al contrario nos dio un pedazo de postip (como se escriba esa madre) fluorescente con unos números y unas palabras con faltas ortográficas y muy “amablemente” nos escoltó a tomar nuevamente periférico…

Y así nos fuimos hasta salir de la monstruosa Cd. De México, con nuestra fosforescente clave maravilla y menos $$$$ unos cuantos cienes de pesos en la bolsa

Pd. En el resto del camino no nos encontramos otra morsa, pegamos la clave a la vista de todos por si las moscas y quiero destacar que sólo era vigente por un día y que en Cuernavaca ya no nos la quisieron valer.

Salud!

(ATENCIÓN: quiero señalar que. No aceptamos comentarios ni críticas de nadie porque nadie nos baja un dedo de pend….jas, pero ya que!) jajajajaja

1 comentario:

Armand dijo...

jajajajajaja se mancho el señor morsa jajaja...presenta a tu amiga no?