miércoles, 11 de junio de 2014

Sin castillos de cristal

Cuenta la leyenda que ella se encontraba en un castillo de cristal, en un mundo rosa, se veía a si misma y a futuro con un hermoso auto, un departamento, una cuenta en suiza (ok exageré), un día, a casi nada de querer salir a explorar el mundo y abandonar su castillo encontró un caballero, éste le enseñó cosas mágicas y comenzó a conocer otra parte del mundo que no había en su castillo de cristal, cosas hermosas y cosas no tanto y después de pensar y pensar y pensar decidió no irse a conocer el mundo y crear un nuevo mundo junto a aquel caballero.



Amor, hoy hace 5 años decidimos crear ese nuevo mundo y vaya que ha costado, decidimos emprender un camino, todavía recuerdo a aquél par de tórtolos que creían que el matrimonio sólo se basaba en el amor y no! la experiencia y los tropiezos nos han enseñado que siempre se necesita algo más. He aprendido mucho en estos 5 años y me encanta saber que te amo más que ayer, sin embargo hoy de una forma diferente y más madura, porque he aprendido a amarte con todo y tus defectos (bueno no todos he!) he aprendido a amar tus silencios, tus suspiros y tus gestos. Además de que alguien que nos ama en exceso nos ha bendecido con dos torbellinos que también forman parte de esta historia... y no, la princesa ni tuvo un auto lujoso, ni un departamento, ni la cuenta en suiza, pero Dios le dio a cambio lo que necesitaba para ser feliz, materialmente le dejó el auto, en lugar del departamento le obsequió un hermoso hogar con un par de niños que ama con todo su corazón, le dio un esposo al que ama inmensidades, y en lugar de la cuenta en suiza, le dio una infinidad de historias y aprendizajes y eso, eso la princesa no lo cambiaría por nada! Te amo mi vida.... gracias y felicidades!